jueves, 28 de enero de 2016

Penélope

28/01/2016

No hay nada claro. Tantas cosas por hacer y tantas en que pensar. ¿Qué ha pasado? No sé, a lo mejor parte de todo esto se apagó, igual que se me apagaron las ganas de hacer tantas cosas. Al final solo se recuerda lo que se quiere y el resto se olvida.

¿Realmente esto es lo que quiero? Antes sí, antes lo tenía todo tan claro, pero ahora no, ahora todo es un sube y baja. 

Comparo:
      Comparo lo que tengo con lo que me gustaría, con lo que desería, y quizás al final acabo pidiendo demasiado; comparo el pasado con el presente, sin ver el presente, como siempre. 

 

jueves, 14 de enero de 2016

Pedro

14/01/2016

Cómo callar al corazón por algo que quiere gritar. Cómo reprimir, empequeñecer aquello que se siente si nada hay que se pueda hacer. Cuando el corazón se deja llevar también es normal, solo busca amor para alimentarse, para darle ilusión y vida a esa persona que lo porta.
No puedes educar al corazón, solo puedes esperar que tarde lo menos posible en darlo todo por la persona adecuada.

lunes, 4 de enero de 2016

Filotea

1/1/2016

Y después de todo esto... ¿qué? Ni si quiera me lo esperaba. ¿Y por qué? ¿Por qué en este momento y en esas condiciones? No podía afrontar esa conversación en esas circunstancias, pero aún así al final acabé abriendo la boca, aunque no todo lo que hubiera querido. Ya era tarde. Mucho se quedó en el tintero.

Me sirvió, me sirvió para saber que soy una asignatura pendiente y nada más, y eso es lo que en cierto modo me ha echo darme cuenta de que todo este tiempo era mi propia fantasía; tantos años para acabar siendo algo pendiente. Y no sé, después de esta noche me ha echo plantearme muchas decisiones que he tomado hasta ahora. Esto es lo que más me preocupa, el por qué resuenan en mi cabeza sus palabras. En mi vida imaginé que la noche acabara así.


Todo al final sirve para aprender.